Guineo doble racimo

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Una de las características principales del guineo doble racimo o “Double Mahoi” es su capacidad para producir dos racimos de guineos simultáneamente en una sola planta, lo cual es poco común y aumenta significativamente la producción por planta. Esto lo convierte en una curiosidad exótica y muy buscada por coleccionistas y amantes de los guineos.

El guineo tiene una textura firme y un sabor dulce que lo hace ideal tanto para consumir fresco como para cocinar.

Esta variedad es de porte bajo (5–7 pies), lo cual la hace manejable, ideal para jardines pequeños y más resistente al viento en comparación con otras variedades de mayor altura.

Además de proveer alimento, el Double Mahoi añade un aspecto atractivo a cualquier jardín o huerto casero.

 

Importante saber sobre sus racimos

  • El Double Mahoi puede producir dos racimos a la vez, pero esto no ocurre en todos los ciclos ni en todas las plantas.
  • En muchos casos, la primera cosecha (planta madre) produce un solo racimo, y el fenómeno de los dos racimos aparece en las cosechas siguientes, cuando la planta está más establecida y vigorosa.
  • Factores como la nutrición, el clima y el manejo del cultivo influyen en que la planta exprese su rasgo único.


 

¿Qué esperar como agricultor o jardinero?

  • Si en el primer ciclo solo ves un racimo, ¡es completamente normal! La planta sigue siendo un Double Mahoi.
  • El potencial de doble racimo se manifiesta con mayor probabilidad en los ciclos siguientes.
  • En cualquier caso, recibirás una planta productiva y deliciosa que rinde racimos de excelente calidad, y con la emoción adicional de poder sorprenderte con la magia de dos racimos en un mismo tallo.

 

Procedimiento para sembrar guineos en la tierra:

1. Selección del lugar:

Elige un terreno bien drenado, con suficiente espacio para el crecimiento de las plantas. Los plátanos requieren un espacio de al menos 10 pies de distancia entre cada planta.

Asegúrate de que el área esté libre de maleza y con acceso a agua abundante, ya que los plátanos necesitan riego constante.

2. Exposición al sol:

Los guineos deben recibir entre 6 y 8 horas de sol directo al día para un crecimiento óptimo. Asegúrate de que el área elegida no esté sombreada por árboles u otras estructuras.

3. Preparación del suelo:

Elimina las malas hierbas y labra el terreno para asegurarte de que el suelo esté suelto y aireado. Un suelo bien preparado facilita el enraizamiento de la planta.

Si el suelo es muy ácido, puedes corregirlo agregando cal para mejorar el pH y hacerlo más alcalino (idealmente entre 5.5 y 7.0).

4. Preparación del hoyo de siembra:

Cava un hoyo de al menos 12 pulgadas de profundidad y 12 pulgadas de ancho. Esto es necesario para que las raíces del plátano se desarrollen adecuadamente.

En el fondo del hoyo, agrega una capa de composta orgánica o humus de lombriz para mejorar la fertilidad del suelo y proporcionar nutrientes esenciales a las raíces. 

5. Uso de fertilizantes:

Fertilización inicial (0-46-0): Utiliza un fertilizante alto en fósforo (0-46-0) al momento de la siembra para promover el desarrollo del sistema radicular y la formación de raíces fuertes. Añade una pequeña cantidad en el hoyo de siembra y mezcla bien con el suelo.

Fertilización para desarrollo y crecimiento (Nitrógeno): Durante la fase de crecimiento, es esencial utilizar un fertilizante alto en nitrógeno (por ejemplo, 30-10-10) para promover un buen desarrollo vegetativo y la formación de hojas grandes y saludables. Aplica una dosis moderada cada 2-3 meses.

Fertilización para racimos: Cuando el plátano comienza a desarrollar el racimo, es importante usar un fertilizante alto en potasio para favorecer el crecimiento del racimo y la calidad de la fruta. Un fertilizante como 17-8-20 para frutas puede ser útil. Aplica cada 3 meses o según etiqueta del manufacturero. 

6. Siembra la planta o semilla:

Siembra la mata o semilla en el hoyo preparado, asegurándote de que los brotes estén orientados hacia arriba.

Coloca la planta a la misma profundidad que estaba en el tiesto para evitar problemas de pudrición.

7. Relleno del hoyo:

Después de colocar la planta, rellena el hoyo con una mezcla de suelo y composta para asegurar un buen contacto entre las raíces y el suelo.

Riega abundantemente después de la siembra para asegurar que la planta inicie el proceso de enraizar.

8. Riego:

Los guineos requieren un riego regular para mantenerse hidratados. Asegúrate de que el terreno esté húmedo pero no encharcado.

En épocas secas, riega más frecuentemente. Durante la lluvia, el riego puede ser menos frecuente.

9. Mantenimiento y cuidado:

Poda: Retira las hojas secas y las flores muertas para mantener la planta saludable y evitar que las enfermedades se propaguen.

Control de plagas y enfermedades: Mantén un control regular de plagas comunes como cochinillas y hongos. Utiliza productos naturales como el aceite de neem para mantener a raya las plagas.

Protección: Si vives en un área con vientos fuertes, puedes considerar el uso de estacas para dar soporte a las plantas jóvenes hasta que desarrollen un sistema de raíces fuerte. También, puede considerar variedades de plátanos de pirre bajo para que se protegen mejor de los vientos. 

10. Cosecha:

Los guineos están listos para la cosecha cuando los racimos han alcanzado su tamaño completo y las frutas están de color verde intenso. Este proceso suele tardar entre 9 y 12 meses desde la siembra.

Usa una cuchilla afilada para cortar el racimo y evitar dañar la planta.

 

Sugerencia adicional:

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Resumen de los fertilizantes recomendados:

0-46-0 (Fósforo) para el desarrollo de las raíces.

Fertilizante alto en nitrógeno para el crecimiento y desarrollo de las hojas.

Fertilizante alto en potasio para promover el crecimiento del racimo y la calidad de la fruta (17-8-20). 

Con estos cuidados y el uso adecuado de fertilizantes, tus plantas de plátano crecerán fuertes y productivas.

 


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