Mangó Columbus Kidney injerto
El mango Comumbus Kidney recibe su nombre por su forma característica en forma de riñón (“kidney-shaped”).
El mangó Kidney tiene algo de fibra en su parte central de su fruto cercano a la semilla y no afecta tanto a la pulpa cercana a la cáscara, que es suave y jugosa.
El sabor del Kidney es dulce y ligeramente ácido, con una carne jugosa que es ideal para comer fresca, en batidos o postres. Tiene un sabor clásico de mango, equilibrado entre la dulzura y una ligera acidez.
Tamaño del árbol: En el suelo, este mango puede llegar a medir entre 15 a 20 pies de altura pero es bastante manejable y se adapta bien a podas.
El mangó Kidney es adecuado para cultivar en tiestos grandes. Requiere un tiesto de al menos 25 galones para permitir que las raíces se expandan adecuadamente. Se puede mantener a una altura más baja (6-10 pies) si se cultiva en tiestos grandes o se poda regularmente. En tiesto, puedes mantener el árbol a un tamaño manejable y adaptarlo a espacios reducidos, con la ventaja de poder moverlo si es necesario. También facilita la cosecha de frutos, ya que es más accesible que un árbol más grande.
Siembra y Cuidado:
- Prefiere lugares soleados con temperaturas cálidas. Necesita al menos 6-8 horas de sol directo al día para un crecimiento saludable.
- El mangó es sensible al exceso de agua. Asegúrate de que el sustrato tenga buen drenaje para evitar el encharcamiento. Un riego moderado es necesario, especialmente durante la temporada de calor.
- Fertilización: Fertiliza con un abono equilibrado (con más nitrógeno durante la temporada de crecimiento) cada 4-6 semanas para promover un buen desarrollo de hojas y frutos.
- Poda: La poda regular es importante para mantener su tamaño manejable, especialmente si se cultiva en tiesto. Asegúrate de eliminar ramas muertas o débiles, y cortar las puntas para fomentar un crecimiento compacto.
- Cosecha: Si se propaga por un injerto, la producción puede comenzar a los 2-3 años.